
Ayer en compañia de unos grandes amigos, Inés hizo un gran descubrimiento: los caballitos. bueno, así los llamabamos nosotros, ahora son de lo mas sofisticados, son coches de carreras o barquitas que van por el agua. Inocente de mí, creía que le iba a dar miedo subir, y no solo no le dió miedo sino que no habia forma de bajarla. Si alguien quiere ir están en el centro comercial H2O ocio, en Rivas.